viernes, 1 de julio de 2011

La amistad

yo quiero caminar y sentir la calle mía,
no con miedo ni pesar sino con calma y nada más,
caminar sin más gusto que caminar.

no quisiera odiar a nadie, no veo razón para hacerlo,
yo no quiero ser odiado porque vivo para amar
pero además entiendo que en todos nosotros
viven al menos un dios y un diablo...

¿dónde está la amistad que yo creía?
las manos que esperaba me saludan nada más.
nadie tiene un real amigo.
yo conozco a judas,
el que quiso seguir siendo
amigo del señor...

hermoso es que hay personas
más grandes que la amistad
y no necesitan dar manos,
pues con su presencia basta
para llegar a entender
y hermoso es también
saber que aún con su ausencia están

lo que me decepciona de los amigos
no es lo que hacen: es lo que espero que hagan,
y no quiero odiar a nadie, no veo razón para hacerlo,
yo no quiero ser odiado porque vivo para amar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario