detente
un momento
para
recoger la cabeza
que
rueda por el piso
oyendo
duros golpes
y
pisadas de botas,
zapatos
y hasta pies descalzos
si
la prepotencia
se
los permite.
la
cabeza se vuela muy fácil,
júntala
y límpiale las orejas
para
que siga oyendo
y
que nunca se le olvide
aunque
crea estar arriba que
la
miseria aún existe
y
es el miedo a ella
y
el coraje contra ella
lo
que nos mueve
cuando
la voz no se escucha
quejarse
no basta
ni
exigir justicia es suficiente
porque
tu voz no se escucha...
hay
un fondo oscuro atrás del cielo
escondido
más allá de las miradas
donde
no alcanza la memoria
al
ayer que nos lastima
hoy
hay otra amenaza y
sabemos
de dónde viene
somos
animales al acecho
de
otros animales al acecho
con
la cabeza por el suelo
y
entre las garras un recuerdo
de
haber sido alguna vez
un
sentido humano
que
no dura mucho...
cuidado
con la ignorancia
y
con la prepotencia
cuidado
con darle al ciego
todo
el poder para guiarnos
detente
un momento
para
recoger la cabeza
que
rueda por el piso
y
que nunca se te olvide...